martes, 26 de marzo de 2013

Cuidar la piel de los niños cuando se exponen al sol

Cuando llegan las vacaciones y el buen tiempo estamos deseando poder disfrutar con nuestros niños de actividades al aire libre en la montaña, el campo, el mar, la playa,… Queremos aprovechar los rayos del sol, porque parece que nos aportan salud y calor. Pero la exposición a la luz solar debe hacerse sin peligros para la piel. Debemos tomar ciertas medidas para mantenernos saludables.

Cuidar la piel de los niños cuando se exponen al sol Especial cuidado hay que tener con la piel de los niños y las personas de mayor edad, porque los rayos ultravioleta pueden ser perjudiciales e incluso causar trastornos en la piel. El sol posee efectos beneficiosos, pero también negativos. Hay que saber que tomar mucho sol envejece antes la piel y cambia su textura. Los rayos ultravioleta son dañinos. En días soleados y sin nubes la acción y potencia de estos rayos aumenta. Pero incluso en días nublados no debemos confiarnos, porque los ultravioletas atraviesan las nubes. El riesgo es mayor a ellos cuanto más nos exponemos al sol. Los rayos ultravioleta se reflejan en la nieve, la arena, el cemento y el agua. Por eso, incluso en invierno, en zonas nevadas, hay peligro de daños en la piel, si no se tiene el cuidado adecuado. Un factor a tener en cuenta es la hora a la que nos exponemos al sol. Entre las diez de la mañana y las cuatro de la tarde se encuentran las horas más peligrosas en cuanto a exposición solar.


Insolaciones, quemaduras, problemas oculares, envejecimiento de la piel, alteraciones inmunitarias,… Y lo más grave, el cáncer de piel. Los rayos ultravioleta atraviesan con su fuerza nubes, camisetas finas y sombrillas. Aunque usarlas ayuda a que pierdan fuerza por el camino. Para protegernos de los rayos ultravioleta debemos usar gorras, sombrillas, gafas de sol y ropa adecuada. Hay que ponerse protectores solares de acuerdo al tipo de piel de cada uno, para pieles claras, medias u oscuras, dependiendo de la edad usar un factor más elevado, sobretodo para los niños y los más mayores. Además, hay protectores solares específicos para la cara y los labios. En la actualidad, en determinados lugares, ya se venden incluso sensores para los rayos ultravioleta, en forma de tarjeta, llavero o pin, entre otros. Todo lo necesario para cuidar nuestra piel lo tenemos a nuestra disposición. Solo hace falta usarlo adecuadamente y disfrutar de las vacaciones y el tiempo de ocio al aire libre.